El enigmatico postre de temporada

Mollete poblano: el postre goloso de los chiles en nogada

Puebla nos sorprende ahora con este raro y antiguo pan relleno de crema pastelera: molletes poblanos. ¡Conócelo!

En Ciudad de México "mollete" significa la mitad de un bolillo o telera untada con mantequilla, frijolitos refritos y un montón de queso gratinado que se come con su pico de gallo y, en algunos casos, tocino, jamón, chilaquiles o hasta cochinita pibil encima (no hay límite pues, el mollete es solo una base). En Puebla es otra historia. El mollete poblano es un pan dulce muy especial, relleno, gordito, goloso, típico, tradicional, histórico y considerado el postre perfecto para acompañar los chiles en nogada.

Se trata de un pan esponjoso, parecido a un brioche, del tamaño de una concha, que se rellena con crema pastelera envinada y coco rallado y se cubre con una capa gruesa de jamoncillo de pepita (ya saben esa pasta suave, tersa y azucarada con la que hacen muchos dulces típicos poblanos). Es un postre barroco, como toda la cocina poblana, complejo de hacer (se tardan varios días en terminarlo) y con un origen católico.


El mollete poblano es un postre conventual. La receta original nació porque las monjas franciscanas de Santa Clara de Asís decidieron crear un postre para honrar a su patrona en su día, el 11 de agosto. Desde finales del siglo XIX ha sido un postre típico de temporada; sin embargo, como coincide con la temporada de chiles en nogada, los poblanos comenzaron a ligar ambos platillos. Ahora, en cada casa y restaurante donde se sirven chiles en nogada se come mollete poblano de postre. Y, si andamos muy conservadores, se bebe pasita (licor de pasa) o rompope para acompañar.


 

Cuando degustar esta delicia

Este postre tan desconocido sólo se hace en una corta temporada. Oficialmente se comienza a vender el tercer domingo de junio hasta el 15 de septiembre con las celebraciones de las fiestas de Independencia, aunque en los últimos años se ha extendido hasta los primeros días de octubre.

Tal vez lo más sorprendente es que por muchas décadas ha sido para los poblanos, el postre compañero de los chiles en nogada, ya que coinciden en los menús y mesas poblanas.

Es un secreto bien guardado, pues los turistas pasan por las dulcerías y los molletes pasan desapercibidos ante sus ojos. En los restaurantes donde se venden los chiles en nogada, generalmente no tienen los molletes.

Los poblanos los compran para comerlos solamente en familia, de uno pueden sacar entre seis u ocho rebanadas. Como es muy dulce, un pequeño triángulo satisface al más goloso.


  

Que no se te escondan 


Es todo un paseo ir a la "calle de los dulces", como cariñosamente llaman los poblanos a la calle 6 Oriente, entre 5 de Mayo y 4 Norte, en el Centro histórico de la Ciudad de los Ángeles. En estas cuadras se concentran todas las dulcerías tradiciones donde podrás conseguir todos los dulces mencionados y los molletes.

Mención especial merece la antigua Dulcería Clarisa, ubicada en la calle 6 Oriente 207, cuya propietaria es la señora Olga Meza Muñoz, quien te atenderá personalmente y te contará las historias de los dulces típicos. Ella aconseja comerlos acompañados con leche fría en desayuno o merienda. ¡No te pierdas la oportunidad de probar en temporada este postre que está en vías de extinción!

¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar